A todos nos gusta lucir un bonito bronceado. Esconde las pequeñas imperfecciones de la piel y le da un aspecto terso y saludable. Pero también hay que conocer la otra cara de la moneda si queremos que nuestras vacaciones veraniegas no se conviertan en una pesadilla de picores, rojeces y dolor debido a la alergia solar (erupción polimórfica lumínica, EPL).
¿Sabías que una de cada cinco personas s
ufre alergia solar? Es la enfermedad de la piel más común y afecta sobre todo a niños, mujeres jóvenes y personas de piel clara.
Conociendo esta estadística te preguntaras como se puede conseguir un bonito bronceado sin arriesgarnos a padecer alergia al sol. En este blog y el siguiente, vamos a hablar sobre la prevención ya que, como bien dice el refrán; “Más vale prevenir que curar”
Vamos primero a explicar que es la alergia solar o EPL.
La alergia solar es una reacción del sistema inmune de nuestro cuerpo que trata la propia piel expuesta al sol como si fuera un elemento extraño, activando su mecanismo de defensa. La causa es una exposición solar más prolongada de lo habitual. El resultado es el enrojecimiento y la inflamación de la piel expuesta al sol, picores y dolor.
Desde la exposición al comienzo de los síntomas pueden transcurrir unas horas o varios días. Por lo general, la alergia desaparece completamente a los pocos días de dejar de tomar el sol.
Una de las causas desencadenantes de la inflamación podría ser debida a un desequilibrio entre oxidantes y antioxidantes en las células de la piel. Los antioxidantes son unas moléculas que liberan a la célula de los radicales libres procedentes de la oxidación celular antes de que puedan causar daño a nuestro organismo. Estos radicales estimulan la producción de una molécula (MAC) que participa en la inflamación de la piel. De ahí la importancia de contrarrestar los radicales libres tomando antioxidantes unos días antes, durante y después de la exposición al sol.
Podríamos explicarlo así; los rayos solares penetran profundamente en la piel y lesionan las células. Se forman radicales libres que a su vez forman compuestos químicos que provocan daño celular. Las personas con EPL sufren un deterioro de la defensa celular que incapacita a la piel para afrontar estos radicales libres con la consiguiente aparición de la alergia solar.
PREVENCIÓN
Tomar antioxidantes para un buen bronceado
15 días antes, durante y después de la exposición al sol. Debemos enriquecer la dieta con antioxidantes naturales como las frambuesas, arándanos, fresas, brócoli, té verde, frutos secos, tomate, ajo, zanahorias y chocolate negro.
Una buena opción que os recomendamos es tomar 1 comprimido diario de “Expert Solar” de laboratorios Fortepharma. Es una formula completa que permite sublimar el bronceado contribuyendo también a la protección de las células contra el estrés oxidativo gracias a la asociación de manganeso, selenio, vitamina C y vitamina E. Contiene también carotenoides de origen natural y aceites de camelia y de onagra.
Expert Solar junto con una dieta rica en antioxidantes nos ayudaran a cuidar la piel desde nuestro interior y protegerla frente al daño oxidativo. Mejorará la calidad del bronceado, protegeremos la piel de las manchas cutáneas y del envejecimiento prematuro y evitaremos las alergias solares.
Tomar betacaroteno
Unos días antes de ir a la playa ya que estimula la producción de melanina (pigmento responsable del color de la piel). Lo encontramos en las zanahorias, tomate, pimiento, melocotón, espinacas (verduras de hoja verde), calabaza, rabos y coles
Exfoliar la piel
Exfoliar la piel previamente. De este modo la dejaremos preparada para los baños de sol. La exfoliación elimina las células muertas dejando la piel limpia y tonificada. También te ayudara a prolongar el bronceado. Un buen exfoliante es “Caudalie Divine Exfoliante 150 g” de laboratorios Caudalie. Gracias a sus cristales de azúcar moreno y su combinación de 4 aceites vegetales (uva, argán, hibisco y sésamo) podrás eliminar las impurezas de todo el cuerpo de una manera suave y eficaz
Hidratar la piel
Es imprescindible. Beber 2 litros de agua al día e hidratar la piel con cremas y lociones hidratantes. Un buen producto es “Bioderma Atoderm crema” de laboratorios Bioderma especialmente indicada para pieles sensibles, secas, muy secas o atópicas. Gracias a sus fórmulas dermopatentadas, Atoderm permite restaurar de manera biológica y duradera la película hidrolipídica de las pieles con falta de hidratación y lípidos
Acostumbrar a la piel poco a poco al sol.
Además de prevenir las alergias, una exposición solar moderada favorece la síntesis de vitamina D, fundamental para mantener una buena salud muscular y ósea.
Evitar tomar el sol entre las 12 y las 4 de la tarde.
A estas horas el nivel de radiaciones ultravioletas es mayor y por consiguiente resultan más agresivas para la piel.
Evitar el uso de p
erfumes desodorantes y cosméticos
Pueden promover la aparición de alergias solares y ser responsables de la aparición de manchas en la piel
Cubrirse bien.
Llevar gorros, gafas, crema labial con protector solar y sombrilla para protegernos del sol.
Utilizar protectores solares que nos protejan de las radiaciones UVA y UVB.
Una protección 50 es recomendable sobre todo en el inicio de la exposición solar.
Además de evitar los riesgos de padecer cáncer de piel, un buen protector solar influye para que el bronceado sea más bonito, duradero y saludable. En el próximo blog trataremos este tema en más amplitud.
Si ya has padecido
alergia solar con anterioridad, te aconsejo que 15 días antes de la exposición solar te apliques sobre las zonas afectadas “Foto Ultra Isdin Solar Allergy Fussion Fluid” de laboratorios Isdin. Refuerza el mecanismo de protección natural de la piel haciéndola más resistente frente a las agresiones de la radiación solar previniendo la aparición de la alergia solar. También alivia los síntomas asociados a la alergia como son el picor y la inflamación.
Un remedio casero que también te aconsejo es triturar un pepino y aplicar la pulpa sobre la zona afectada. Calma y frena la erupción.
Aplicarse after sun.
Tras la ducha, utilizar cremas antioxidantes e hidratantes para reparar el daño de la radiación solar. Una buena opción es utilizar productos que contengan Aloe Vera en su composición ya que proporciona un efecto calmante, antiinflamatorio y reparador sobre la piel.
Una vez ha aparecido la alergia solar no debemos exponernos al sol ya que se agravarían los síntomas. Aunque no vayamos a la playa, hay que cubrirse bien las zonas afectadas antes de salir a la calle.